23 de septiembre de 2010

Una vida a contrarreloj



''Y me parece algo gracioso.
Y me parece algo triste.
Los sueños en los que muero, son los mejores que he tenido.
Me parece difícil de aceptar
cuando la gente corre en círculos
es un mundo muy muy...loco.''







   Siglo XXI, se trata de un siglo protagonizado por los avances tecnológicos y numerosos proyectos de cara al futuro, un siglo inconformista, una atmósfera llena de constantes elecciones y tan poco tiempo donde al tomar una elección, se abre una puerta que nos presenta más elecciones todavía, un verdadero universo cuántico donde el resultado es algo automático que nace del agotador trabajo diario que hace olvidar la palabra descansar, descansar y pensar en todo lo que ocurre en el mundo o simplemente, mirar alrededor y observar a las personas, sus comportamientos, su manera de caminar, de hablar, jugar, sonreír, comer, enfadarse... Ahora es cuando todo se ralentiza y se hace más evidente, todos se dirigen a alguna parte, o eso creen, un sitio donde cumplirán sus metas y sueños. Se ve como las madres agarran a sus hijos de la mano hasta que un día esa criatura, que en un ayer fue indefensa, se hará mayor y se lanzará en picado a este peligroso mundo con rumbo hacia la victoria. La vida del S.XXI son ciudades grandes alocadas con personas convertidas en robots para llevar diariamente una vida ajetreada y traer a casa el pan de cada día, crean o ya no crean en Dios porque aguantamos a este loco, pero maravillosamente loco mundo.

  Parece que todo sigue su rumbo, parece, pero a la vez cae poco a poco en la ignorancia algo muy importante, es más, lo más importante, el hecho de que somos personas, y no máquinas que siguen una ecuación calculada al más mínimo detalle, máquinas a las que no les queda poco más que empezar cada día de cero y olvidarse del pasado aceptado pero sin tiempo a ser comprendido para dirigirse en busca de nuevos logros. A veces los sentimientos se olvidan y toca perdonar la vida al darse cuenta de la inocencia humana al ser reflejada en una marioneta de la vida misma.

  La vida, ¿Pero que es la vida? En el ritmo de este loco mundo no hay ya ni tiempo para preguntarlo y  se omite este tema de reflexión filosófica, metafísica, religiosa e incluso científica. Vida, después de dar muchas vueltas a esta palabra de tan sólo cinco letras pero que engloba la existencia de la humanidad y muchas noches de insomnio, es curioso como esta palabra, este significado, se resume en otra palabra mas directa, esta de tan sólo ya cuatro letras, amor, tan solo amar, tan solo ser amado y tan solo ser recordado.

‘’Al parecer la vida esta construida de tal forma. A las flores no les basta con tener pistilos y estambres, y un insecto o la brisa debe introducir el pistilo en el estambre. La vida es igual, contiene su propio vacio, que solo otro puede llenar. Al parecer, el mundo es la suma de esos otros, y sin embargo, no sabemos ni nos dicen si nos complementamos mutuamente. Vivimos de forma desperdigada y volandonos unos a otros. ‘’ Fragmento extraído de la película Air doll (2010).



22 de septiembre de 2010

Pesadilla









Rápido... Muy rápido corro en busca del sentido por esta tierra llena de grietas venenosas, una tierra sin mares, mares evaporados hace años. Excusas. Parece que llueve y llueve muy fuerte, pero aún puedo leer entre líneas. Le diré a mi familia que desaparecí de por vida, le diré al gobierno que tengo una misión secreta en este mundo. Sólo las zuelas de mis zapatos desgastados saben adonde van porque tienen claro que sea adonde sea, tienen que llegar.





 Euforia escarlata agrietada de tristeza. Melaconlía.  Encontraré algo en mi camino, sé que lo encontraré, soñando, durmiendo con fantasmas de un pasado surrealista que nunca fue. Ya no puedo leer entre líneas, ya me pierdo, otra vez callejón sin salida, otra vez un nada sin sentido, pero ahora es cuando veo la luz intensa que logra quemar un poco mi cara. Células muertas y explosiones en el cielo, cielo celeste, celeste fue. Mis pupilas se dilatan por el efecto de la droga más peligrosa llamada vida, mis latidos se acelerán en dirección hacia donde estás. Echo a correr y tropiezo, tropiezo con el dolor y entonces resbalo. Pero quien tropieza avanza dos pasos, dos pasos si logra levantarse. Derrotas y victorias, el suelo, el punto más bajo y a la vez nuestro único punto de apoyo permanente. Y entonces leo entre líneas y lo veo, lo veo con mis propios ojos, alguien se desarmó y dejo una pistola en el suelo,  parece que fue colocada con mucho cuidado como si alguien me estuviera esperando. 




'Siempre hay esperanza en el mañana, en el mañana que puede no llegar' pensé. Es una lucha, un desafío, es el último enfrentamiento que tengo que ganar, no voy a rendirme, voy a gritar para que el mundo sepa el infierno que estoy pasando, el infierno que pasan mis ojos rojos llenos de rabia a reventar. Una lucha más...  Lucha o muere. Tantos recuerdos, recuerdos de una noche con fantasmas, siluetas que quedan grabadas en los pasadizos más secretos de mi alma. Sueños. Pesadillas. Vida. Me levanto, soy fuerte, fuerte como nunca ante la tormenta infernal de mi ser. Fuego... ¡¡¡Fuego!!! Todo se está quemando!!! Pero yo gano, pierdo, y gano una vez más. Por fin me encuentro de pie desafiando el mundo con una sola mirada. Por fin desperté, por fin siento el calor del amanecer en mis pupilas todavía dilatadas, un nuevo amanecer de un día que todavía está por escribir.

  

Noche tras noche


El dolor más agudo se cobija tras su silencio.  Sus lágrimas son capaces de inundar las inmensas calles de una ciudad entera...



Ella camina por las calles en busca de la respuesta pero sólo se encuentra cara a cara con el frío gélido que se desprende de las calles congeladas, lágrimas en hielo. ¿Qué hacer si la respuesta en ninguna pared escrita está ni en ningún libro de este mundo se publicará? Una respuesta escondida que sólo tras los labios de él estará.

Miedo... Miedo de encontrarle de frente y mentirle cuando le pregunte qué tal.
Miedo... Miedo al no o tal vez lo que nunca le dirá.
Miedo... Miedo al silencio eterno.
Miedo... Miedo al adiós que con su vida acabará, sabiendo que ellos juntos nunca estarán.





Y por primera vez ella quiere que se vaya, pero ir jamás le dejará.